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Al aplicar rubor es importante elegir un tono que complemente nuestro tono de piel y que se vea bien con el look de maquillaje que queremos lograr. Si queremos darle luz a nuestro rostro con un maquillaje cálido, probablemente será mejor elegir rubores en tonos anaranjados, si optamos por un look más frío, prueba con tonos de rubor más rosados, incluso llegando a los fucsia. Y, si prefieres algo más neutro, puedes elegir rubores en tonos tierra que darán un efecto nude.
Los rubores en polvo tienen la gracias de que son más fáciles de difuminar, por lo que es más fácil lograr una aplicación sutil y natural. Por otra parte, los rubores en crema, especialmente si son tornasolados, son perfectos para dar brillo (pero en este caso hay que tener cuidado si tu piel tiende a ser más grasosa). Y qué pasa con los rubores en barra? Los rubores en barra son de fácil aplicación y puedes usarlos con los dedos, por lo que son ideales para un retoque rápido, además lo bueno, es que te sirven para labios y ojos.
Muy fácil! Si tu rubor es en crema, líquido o en barra, sólo necesitas tus dedos para aplicarlo. Si te gustan los rubores en polvo, en vez, siempre deberías usar una brocha en ángulo para difuminar bien el producto.
Otra cosa que hay que considerar, es que no debes aplicar el rubor muy cerca de tu nariz, ya que así te verás como si estuvieras acalorada en vez de lograr un aspecto saludable.